Miles de veces a lo largo de nuestras vidas, vamos a toparnos con personas que tienen distintas opiniones a las que nosotros tenemos,su modo de vida es diferente, sus ideas, sus metas, y bueno para no seguir todo en ellos se opone a lo que nosotros somos y pensamos, sin embargo esto no quiere decir que ellos estén mal y nosotros bien, porque seamos realistas, ninguno de nosotros tiene el manual en donde se descubren todos los secretos de cual es la ruta correcta para ser exitoso y feliz, por lo que cada uno de nosotros debemos de ir descubriendo día con día que es lo que funciona PARA NOSOTROS, y nada más. Formaremos nuestros criterios de acuerdo a las experiencias que vayamos teniendo en nuestra vida, de las que aprenderemos o no, nuestra madurez será distinta con el paso del tiempo lo que provocará que nuestras prioridades evolucionen, y bueno en general lo que vayamos encontrando en el camino, ya sea situaciones, cosas y sobre todo personas, es lo que ira marcando nuestra vida, y como cada vida es completamente diferente, es por eso que obviamente todos los seres humanos somos tan distintos. Así que debemos de aprender a no juzgar a las demás personas, y permitirles ser quienes ellos luchan por ser, y cuando nos topemos con algo que nos molesta, pues nada a darnos la vuelta y seguir nuestro camino, que para eso es que la tierra es tan grande para que podamos andar por la vida en rumbos distintos los unos de los otros. Claro cuando alguien te afecta directamente no tienes que decir; está bien lastímame que al final yo seguiré mi camino, porque no es así, puedes muy bien poner los límites a tu alrededor, sin tener que ir peleándote con medio mundo,porque hay gente que confunde poner límites con traer la espada desenvainada, así que bueno ya habiendo aclarado esto podemos entender que permitir que los demás vivan su vida a su manera, no quiere decir que tengamos que ponernos de tapete para nadie, sólo quiere decir que ellos, como nosotros tienen la capacidad de elegir.
Si todos aprendiéramos a respetar a los demás el mundo sería un lugar mucho mejor, si dejáramos de asustarnos porque una mujer le da pecho a su hijo en un centro comercial, si simplemente le cambiáramos de canal cuando apareciera un programa que no nos gusta, o cambiar de estación cuando se escucha un tipo de música que nos molesta, en vez de ir encarando, criticando y enfrentando a quienes gustan de lo que nos disgusta, de verdad estoy segura, es más, lo firmo ante notario, que más de la mitad de los problemas desaparecerían de esta tierra. Y se preguntarán tal vez a que viene todo esto, y es que hace unos días vi un video en donde una mamá decide darle pecho a su bebe en la calle y me impactó como la gente puede ser tan agresiva para llegar a insultar a una mujer por algo tan simple como darle de comer a un bebé, y es que habrá quienes estén a favor o en contra, habrá mamás que se sientan cómodas haciéndolo y habrá otras que no, pero la realidad es que no es nada tan grave como para que no puedas seguir tu camino y simplemente no voltear a ver, punto así de sencillo. Yo me acuerdo que cuando niña que íbamos al parque había muchas mujeres indígenas que estaban dando de comer a sus hijos, y pues si recuerdo que me causó curiosidad y le pregunté a mi mamá y pues nada su respuesta fue tan simple que seguí mi vida como si nada, ni se me salieron los ojos, ni me quedé ciega ni quedé marcada, ni me volví loca, ni nada de eso, porque la realidad es que son una de las millones de cosas con las que nos podemos topar todos los días sin que nos pase nada grave. Grave sería que alguien sacara una pistola y se pusiera a amenazar a los demás y que yo dijera sigue tu vida y deja que el viva la de él, eso si sería grave, eso si sería algo como para que el mundo tuviera que intervenir, y no el hecho de que una mamá está buscando saciar el hambre de su hijo, así que por favor aprendamos que cuando algo no nos gusta, no tenemos que ir como "salvadores" de la humanidad a encarar a la gente y a ser los predicadores de lo correcto, porque les juro que ni ustedes ni yo sabemos a ciencia cierta cual es el camino que nos llevará a la Utopía.
Así que bueno habiendo defendido mi punto de vista, dejaré que cada quien tenga el suyo, y los respetaré, pero eso si, cuando vea que alguien ataca a una mujer por dar pecho o a cualquier otro ser humano que esté buscando su felicidad, no aplaudiré la agresión, sino que me acercaré al atacado y les haré saber que no están solos en la vida, porque al menos yo, me siento feliz en este mundo diverso.
JESSICA WOOLRICH